Un tribunal en Bretaña en Francia de noroeste se enteró ayer que como cuatro miembros de una secta fanática al black metal anticristiana consumiendo alcohol haciendo alborotos abastecidos de combustible que rompen cruces de granito antiguas en cementerios y desmadraron una capilla de siglo XVI dictada como un monumento antiguo.
Con una Biblia satánica en la mano y utilizando a una guía turística a la peregrinación a la iglesia ubicaron sitios santos de adoración donde ellos alegaban que santos Católicos habían levantado monumentos antiguos, celtas paganos que los substituyen con iglesias cristianas y capillas.
Ellos pintaron símbolos satánicos e invirtieron cruces a los locales que ellos profanaron - todo en nombre de su secta, el Metal Verdadero Negro armónico.
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